Dieta de la Zona
Esta dieta surgió en Estados Unidos impulsada por el bioquímico Barry Sears.
Su fundamento se basa en que el bienestar y salud óptima de una persona, están regidos por un eficiente funcionamiento del cuerpo y la mente. Eso es estar en la zona.
La forma de entrar en la zona, consiste en una dieta equilibrada, (la dieta de la zona) en la que hidratos de carbono, proteínas y grasas se encuentran rigurosamente controlados dentro de cada comida.
Originalmente la dieta de la zona surgió como oposición a las dietas ricas en hidratos de carbono, puesto que éstas no consiguen hacer desaparecer el exceso de grasa corporal, ya que provocan una superproducción de insulina, y la producción de eicosanoides malos. El exceso de insulina se traduce en un descenso del nivel de azúcar (glucosa) en la sangre, que es transformada en grasa y al mismo tiempo bloquea el acceso a nuestras reservas de grasa, causando multiples complicaciones de salud y enfermedades.
En la dieta de la zona se tiene más fácil acceso a las reservas de grasa acumulada, para convertirlas en energía, que a los hidratos de carbono acumulados. Consecuentemente se tiene una mayor concentración mental y mejor rendimiento físico.
Se aconseja realizar cinco comidas al día, de las cuales dos serán livianas.
Nunca se deben dejar pasar más de 4 ó 5 horas entre ellas, ya que de lo contrario se dispara la tasa de insulina y se alteran los niveles de azúcar en la sangre.
Los alimentos recomendados de la dieta de la zona son:
Hidratos de carbono:
Se deben evitar los alimentos con un alto índice glucémico o sea que aumentan mucho y muy rápido los niveles de glucemia como el azúcar refinado, la miel, la glucosa, el pan blanco, las patatas y todos los cereales, pastas y productos hechos con harina blanca (refinada)
Optar por aquellos alimentos como las frutas, verduras, legumbres y cereales integrales ,ya que la fibra ayuda a descender la absorción de azúcares y grasas (tanto en cuanto a cantidad como en velocidad)
Proteínas (vegetales y animales):
Dentro de las vegetales tenemos el tofu, el gluten o seitán, el alga espirulina, la levadura de cerveza y todas las legumbres (lentejas, soja, porotos, garbanzos, etc.)
Entre las proteínas animales recomendadas, están la carne de pollo, pavo y conejo, así como los pescados azules y el magro del jamón. Yogures y leches fermentadas.
Es necesario evitar el resto de productos lácteos enteros, como los quesos. También se evitarán las carnes rojas.
Esta permitido utilizar proteína en polvo.
Grasas:
Las grasas se pueden obtener del aceite de oliva, aceitunas, o de la mayonesa.
Aspectos importantes
Es necesario que el tipo de proteínas sea lo más saludable posible para no sobrecargar los riñones y no acidificar demasiado nuestro organismo.
Ejemplo de un menú de la dieta de la zona
Desayuno
Tostadas de pan integral con jamón dulce o serrano (sin la grasa) y café sólo (suave).
Dos yogures desnatados o kefir, con muesli (no azucarado) y café o te rojo.
Refrigerios de media mañana – tarde
Una pieza de fruta (pera, manzana) y cinco almendras o avellanas.
Un postre de soja y frutos secos.
Se puede sustituir el refrigerio por una barrita de las de régimen, siempre que lleve una proporción de proteína entre el 50% y el 100% de los hidratos de carbono.
Comida – cena
Una proteína (pechuga pollo 120 g., pechuga pavo 120 g., hamburguesa pollo o pavo, atún 140 g., salmón 180 g., merluza 180 g.)
Más un hidrato de carbono: col, coliflor, brécol o brocoli, judías verdes, tomate, lechuga y cualquier fruta.
Grasa. 12 aceitunas o 4 cucharas pequeñas mayonesa light o 1 cucharada y media de aceite de oliva.
Ventajas de la dieta de la zona
Sirve para perder grasa corporal, mejora el rendimiento físico en el caso de los atletas y mejora nuestra salud.
Lo único que necesitamos es mantener de TODAS las comidas un equilibrio entre proteínas, hidratos de carbono y grasas.
La proporción ideal es del 0.75%, es decir 3 g. de proteínas por cada 4 g. de hidratos de carbono.
Además de la proporción de alimentos hay que tener en cuenta la cantidad, esta depende del sexo, peso, porcentaje de grasa corporal y actividad física de cada individuo.